Considerado como uno de los más importantes pintores del siglo XX, Henri Émile Benoît Matisse -conocido comúnmente como Henri Matisse-, nació el 31 de diciembre de 1869 en la antigua región de Picardía, Francia. 

Sus temáticas solían ser en su mayoría domésticas o figurativas, y poseían un tratamiento distintivamente mediterráneo, una característica que le otorgó el papel de líder del movimiento Fauvista en 1900, y a lo largo de su carrera persiguió la expresividad del color.

 

Cartel Matisse Berggruen & CIE

Cartel Matisse Berggruen & CIE - Henri Matisse

 

Si bien, su familia trabajaba en el comercio de granos, Matisse tomó otro camino y trabajó como asistente legal para, posteriormente, estudiar Licenciatura en Derecho en París, desde 1887 hasta 1889. Fue en su período trabajando en una oficina de leyes, que comenzó a tomar clases de dibujo. 

Sin embargo, no sería hasta cumplir 21 años, que Matisse encontraría su verdadero gusto por la pintura, luego de comenzar a pintar mientras se recuperaba de una enfermedad que lo imposibilitaba de salir de su hogar. Fue entonces que su vocación como artista se consolidó.

En el año 1891, Matisse se mudó a París para comenzar sus estudios artísticos. En aquel entonces, tomó lecciones impartidas por reconocidos artistas de la época, en escuelas como la Académie Julian y la Escuela de Bellas Artes (École des Beaux-Arts) de París, donde aprendió según el método académico tradicional, que requería copiar el trabajo de los “antiguos maestros”. Sin embargo, Matisse también adquirió conocimientos de trabajos del Post Impresionismo de Paul Cézanne y Vincent Van Gogh mientras vivía en Paris.

 

La Desserte - matisse

La desserte (1908) - Henri Matisse 

 

Sus primeras exposiciones las realizó en distintas exhibiciones en París, que reunían a un gran grupo de artistas emergentes, incluso llegó a presentarse en el tradicional Salón de la Société Nationale des Beaux-Arts, donde su trabajo recibió comentarios favorables.

Al llegar el siglo XX, Matisse se vio influenciado por el trabajo de Georges Seurat y Paul Signac, que solían pintar utilizando el estilo de “puntillismo”. Por esta razón, dejó de mostrar sus trabajos en el tradicional Salón de Bellas Artes, y comenzó a presentar sus obras en el Salón des Indépendants, desde el año 1901, un espacio que era considerado más progresivo para la época.

Para 1904 Matisse ya mostraba grandes avances en su arte. Una visita a Saint-Tropez, en el sur de Francia, lo inspiró para comenzar a pintar de manera brillante y luminosa como lo hizo en “Lujo, calma y voluptuosidad” (1904), y luego de su paso por la Villa de Collioure en el Mediterráneo, se inspiró para crear una de sus obras más destacadas “Mujer con sombrero” (1905). Fue gracias a la presentación de estas piezas que se comenzó a hablar de un nuevo estilo de pintura, el “Fauvismo”.

 

Mujer con sombrero (1905) - HenrI Matisse

 

Al pintar en este estilo, Matisse empatizaba con el poder emocional de las líneas curvas, la pincelada fuerte y los colores brillantes, tal cual se ve en trabajos como “La alegría de vivir” (1905), una gran composición de desnudos femeninos posando en un paisaje. Como muchos de sus trabajos más maduros, esta escena capturó un ánimo más allá de solo intentar representar el mundo de manera más realista. 

Tras encontrar su propio estilo, Matisse disfrutó de un período de mucho éxito. Compró un gran estudio en París y firmó contrato con la Galerie Bernheim-Jeune. Sus obras fueron compradas por coleccionistas importantes como Gertrude Stein en París y Sergei I. Shchukin, destacado hombre de negocios, que además comisionó dos de las más importantes obras de Matisse, La Danza I (1910) y La Música (1910).

 

La Danza (1910) - Henri Matisse

 

Desde 1910 en adelante, Matisse continuó trabajando con técnicas de colores saturados, detalles limitados y contornos fuertes, dando como resultado obras que deleitaban a quien las observaba. Algunos trabajos, como Piano Lesson (1916), exploraron las estructuras del Cubismo, el movimiento cuyo pionero fue su rival directo, Pablo Picasso. Sin embargo, sus temas siempre fueron más tradicionales: escenas de su propio estudio, retrato de amigos y familia, pinturas de figuras en un cuarto o en paisajes naturales. 

En 1941, a causa de una cirugía, Matisse estuvo en cama por largo tiempo pero continuaba trabajando desde su estudio. Llegó incluso a pintar con un lápiz o el carbón atado a una vara, que le permitía alcanzar el lienzo sobre el que trabajaba, esto ayudó a que sus últimas obras fueran tan experimentales y vibrantes como los de sus comienzos artísticos. 

 

 

Cartel Matisse Aix en Provence (1960) - Henri Matisse

 

Uno de sus últimos grandes trabajos fue crear un programa de decoraciones para la Capilla de El Rosario en Vence (1948), una ciudad cercana a Niza, donde diseñó vidrieras, murales, mobiliario y hasta vestiduras sagradas para los sacerdotes de la iglesia.

Henri Matisse murió el 3 de noviembre de 1954, a sus 84 años y hasta el día de hoy es reconocido como uno de los más innovadores e influyentes artistas del siglo XX.

Encuentra la colección de Henri Matisse en versión Pasquín, a través de nuestra página web, www.tiendapasquin.cl.

 

Alejandra Martinez